Sábado, 14 de agosto de 2010. De pronto perdí todo contacto contigo. Ya no pude llegar al teléfono, recordar ese número y llegar a tu. Ya no pude volar sobre ti como todos los días a las tres de la tarde. Estas pobres alas no dieron más. Y aquí me tienes ideando estas líneas que reflejan mis ojos cansados. De ir caminando con la mente y las manos repletas de. Yo fui el primer sorprendido. Detrás del otro entre las matas y bancas del parque.

ES UNA PUBLICACION DE LA SOCIEDAD POETICA SOMBRAS DE FUEGO. Sábado, 14 de agosto de 2010. Una deliberación del ala y la tormenta es lo que cae cuando. La agria balandronada de los sueños se pega al paladar. Y el muchacho despierta en la mañana. Penetrando el espejo con un grito. En la materia de los violoncellos, el enemigo bosque. Turgente como una curva embreada, someten bruscamente. Su furor y su régimen. Y el muchacho despierta en el silencio.