Blog de misceláneas de Eduardo Mileo. Voy a escribir un poema. Voy a escribir un poema. Voy a escribir con tus manos. Voy a creer que te escribo. Voy a escribir un silencio. El arma de mi poesía. Voy a escribir un lugar. Voy a pedirte que me escribas. Las manos de los árboles. Abrir la llave del mar.

Deterioro de los términos de intercambio. Científicos del patrimonio pueden trabajar. Depreciado este hogar, no inferir. Consecuencias que carcoman la agenda pública. Apretando una lata hasta romperla. Imaginé cualquier cosa sobre el futuro. En el pecho te esperaba como un pozo. Se descascarará más la estación por una predicción aceitada. Traté de construir un nuevo alcance, de tener una casualidad enorme. Trabajo sobre el caracter de verano.

Estrategias en contra del anonimato. Vieni qui, facciamo una poesia che non sappia di nulla, e dica tutto lo stesso. 8220;Vieni qui, facciamo una poesia che non sappia di nulla, e dica tutto lo stesso. Este viernes 4 -a las 20hs puntual- voy a leer poemas junto al amigo Charly Gradin y nos va a acompañar el músico Javi Punga, platense él, en el Centro Cu. Niña en el cubil de la virilidad. Historicidades eran las de antes.

Hago del escondite mi silencio. Hago del escondite mi silencio. Atrapo la boca en un movimiento plano. Hago el silencio con el cierre. Como un pájaro en mano de masilla. Como una mancha de luz. No es necesario guardarse ahí. Qué es el silencio cuando se lo usa. De funda, de sombrero, de montura? Qué cosas silencio hoy en día? Sé que no estoy fumando porro.

Jueves, 15 de julio de 2010. Sin el CORAJE DESLUMBRANTE DE LA MAYORÍA DE LAS MUJERES ARGENTINAS, la hermosura infinita de esta Ley, no sería una de las realidades más felices de las Provincias Unidas del Río de La Plata. Y todos les estamos agradecidos siempre. Miércoles, 14 de julio de 2010. 161;Fuera del Estado Argentino! 161;La Iglesia fuera del Estado Argentino! Enlaces a esta entrada.

Domingo, 27 de diciembre de 2009. Era una gallina de domingo. Todavía vivía porque no pasaba de las nueve de la mañana. Desde el sábado se había encogido en un rincón de la cocina. No miraba a nadie, nadie la miraba a ella. Aun cuando la eligieron, palpando su intimidad con indiferencia, no supieron decir si era gorda o flaca. Nunca se adivinaría en ella un anhelo. De Clarice Lispector, completo acá. Miércoles, 23 de diciembre de 2009.

Pequeñas descargas de afecto de un artista en suspenso. Pero no sé de qué. Es que mejorás mis deseos. Es un jardín de maravillas. Gracias al infierno que existen. Y ser el más incestuoso de los hermanos.