Un lugar sin espacio en lo finito . tan solo ilusiones que se vuelven maravillas. Aquí fuera soy un títere controlado por la estatua, soy la mano atrapada por el torbellino de murmullos,. El monstruo que se come la escalera, el desagüe que se lleva las gotas de triste sal. Aquí fuera me encuentro prisionero. Aquí dentro nunca es igual, por lo que me pregunto donde estoy sin referirme al lugar ni al tiempo que describen mi entorno, sino a la interrogante d.

Martes, octubre 28, 2014. Los golpes que da la vida. La vida también sabe golpear. La vida también golpea donde más duele. De pronto te encuentras hablando por teléfono con alguien. Y de la plática más sin chiste, la más equis de la vida, sale a tema el comentario que vino a sacudir tu mundo. Esas seis, siete, ocho o nueve palabras que te han dejado con las manos frías y la boca seca. Y de pronto llega alguien. Y así es como dejas de tomar café con azúcar.