Viernes, 25 de febrero de 2011. Muchas cosas han pasado desde la última vez que escribí en este espacio. El nacimiento de mi Bello Samuel, persona que sin hablar, sin decirme nada ha cautivado mi corazón justo antes de conocerlo, pero hay que vivirlo para entenderlo. Y como estoy tan enamorada de Samuel, he querido dedicarle este post. A esa personita de apenas.

Y todo era un ruin desastre al querer perturbar o eliminar el orden de mis menesterosas e individuales letras anteriores. Y así, comencé a soñar con aquellas grafías macabras que cada vez más se propagaban y disfrutaban, con vil éxtasis entre sí, sus distintas imágenes malignas que. Para otros de aquellos remotos caracteres creativos y encantadores antes de aquel grotesco cambio. Olvido lo feo, r.