Thursday, September 26, 2013. Si pudiera escoger, lo haría. Juro que si pudiera escoger otra profesión, lo haría. Habría sido doctora, maestra, abogada o cualquier otra cosa. Es más, en este momento le estaría echando ganas al negocio que se supone que estoy montando o a la maestría que sigo con un entusiasmo más bien reducido. La realidad es que lo anterior es la fachada para los días en que me quedo en casa y escribo.

Jueves, 18 de febrero de 2010. Shout Out Louds - 1999. Miércoles, 10 de febrero de 2010. Llevo ya una semana en Barcelona. Ahora si, cántenle! You clo.

Trapos , nichos, imágenes, hilos, agujas, lápiz, pintura, papel, pluma, compu, joyeria, yeso, barro, metaloleos, acrílico, piedras, manualidades, ropa, decoración, moda, cocina, collage, foto, madera y mucho mas. Lunes, 13 de octubre de 2008. Sé que todos tenemos una hija, sobrina o alguna. Este Corazón es un símbolo de esperanza. De que el hombre indicado llegará. Es una colección de 25 corazones, cada uno hecho. En noches de decretar al hombre deseado y asi mismo. Me enseñe el camino que recorrer.

Este año me porté muy bien, cedí en mi lucha PC vs MAC y me hice cliente de tu marca, compré dos computadoras que por razones que ahora ya no importan no conservo. Mi compromiso del próximo año es seguir convirtiendo a más gente al camino de luz, diseño y eficiencia que nos provee tu siempre creciente empresa. Gracias y te dejo una oración como muestra de que creo en ti. Steve Nuestro que estás en I-Cloud, recordada sea tu Marca, vengan a nosotros tus gadgets en la tierra como en I-Tunes.

Lunes, abril 07, 2008. Este blog ha cumplido su propósito y no da para más, pero no tengo el corazón para borrarlo. De ahora en adelante estaré en Polvo en el Ático. Miércoles, abril 02, 2008. Desconocidos en un bar sin nombre. El recién llegado saludó a Jim con un gesto de la mano y se dirigió a la mesa donde se encontraba el niño.

Jueves, 18 de septiembre de 2008. La tranquilidad del departamento es interrumpida por el abrir de la puerta. Él entra y con la certeza de quién sabe vive solo, enciende las luces y camina con pisadas fuertes. Le espero, como es mi costumbre, en un rincón del recibidor, debajo de la mesa que sostiene la charola donde arroja sus llaves. Él pertenece a una estirpe de hombres muy valiosa para mi especie, aquellos que hacen caso omiso a todo cuanto sucede a su alrededor.